miércoles, 25 de agosto de 2010

Técnicas de Estudio 3°1°- Tutoría

IMPORTANCIA DE LAS TÉCNICAS DE ESTUDIO


Las técnicas de estudio configuran una metodología guiada de la manera de estudiar, de las pautas a seguir en el proceso, de cómo empezar una sesión de estudio de la mejor manera y del desarrollo de la misma utilizando técnicas concretas: lectura, resumen,esquema.Deben conocerse todos los métodos de estudio posibles y, entonces, escoger el más favorable para uno mismo. De este modo, se personaliza la manera de estudiar y así se adapta mejor al resto de hábitos y capacidades. Si uno tiene facilidad para sintetizar, el resumen le puede resultar ventajoso. Si, por el contrario, uno capta la información gráfica, el esquema que le favorece es el "estudio-fotográfico".
Las técnicas de estudio se están convirtiendo en uno de los conceptos más importantes en el mundo estudiantil. Después de ver todo el fracaso escolar que se está cosechando en los centros educativos, a los estudiantes les queda la opción de mejorar su rendimiento con normas, trucos, técnicas o recetas de estudio que puedan mejorar claramente los resultados.

Las técnicas de estudio son un conjunto de herramientas, fundamentalmente lógicas, que ayudan a mejorar el rendimiento y facilitan el proceso de memorización y estudio.





Ante todo es fundamental la mentalización de "tener que estudiar". Si partimos de la base de que no queremos estudiar el resto sobra.
Pero es evidente que ante la situación social la preparación concienzuda para nuestro futuro laboral es algo clave.
La organización a la hora de comenzar un año escolar es fundamental. Partiendo de nuestro horario de estancia en el centro donde estudies, debes organizar el resto del tiempo para poder llevar al día la preparación de los contenidos que vas viendo día a día.

El estudio diario, siento decírtelo, es casi obligatorio.

No consiste en estar delante de los libros dos o tres horas todos los días. Consiste en ver nuestras propias necesidades, analizar en que campos o temas tenemos más problemas, cuales son las prioridades inmediatas (exámenes, y trabajos, presentaciones, etc.), y a partir de ahí confeccionarnos un horario de "trabajo" diario. Sí, digo bien, "trabajo" ya que debemos concienciarnos que el estudio, hasta llegar al período laboral social, es nuestro verdadero trabajo y lo debemos ver, o por lo menos intentar, como algo inherente a nosotros mismos que va a facilitar, con toda seguridad, nuestra posterior vida laboral.
Estudiamos para nosotros, para nuestro porvenir, no para nuestros padres.
En esta página tienes diversas técnicas o maneras de poder mejorar en aquellos conceptos que tengas mayores problemas y cuestionarios para detectar tus fallos.
Verás que las mismas ideas se repiten una y otra vez: así se te quedarán a base de leerlas.
Espero que estas ideas te sean útiles.

por qué estudiar

DAME UNA PALANCA...
¿Qué son los motivos? Puede decirse que son como ''palancas" de la voluntad, instrumentos que ayudan a hacer algo. Es necesario motivar, pero ¿cómo se motiva? ¿Qué clase de motivaciones son las más adecuadas?
Cada uno se conoce mejor que nadie y sabe qué cosas son las que mejor le mueven a realizar tal o cual acción. Pero no se trata sólo de lograr la ejecución de esa tarea, de ese estudio, al precio que sea. Se trata de que vos, con esa motivación, te beneficies como persona, ganes en autonomía y libertad. La motivación hacia el estudio se integra, como un elemento más, dentro del amplio capítulo de la educación de la voluntad. Se trata de que “quieras estudiar” por vos mismo.


El valor y sentido que des a tu trabajo influirá notablemente en la motivación hacia el estudio.
Lo que más motiva es siempre el éxito personal; y el éxito es alcanzable sólo si se poseen los medios técnicos adecuados (técnicas y hábitos de trabajo intelectual). A veces, puede entrarse en una crisis de "por qué estudiar", simplemente porque falla el "cómo".
Encontrar motivos para estudiar es importante, pero sin exagerar. Aunque esté muy motivado porque le "vuelven loco" las matemáticas, esto no hace innecesario el esfuerzo personal. En eso, nadie le puede sustituir
En cuanto a la motivación se trata de que "quieras" estudiar por el estudio mismo, y no por el premio o castigo que espera.
A veces, no hay motivación que valga porque una asignatura concreta no te interesa. Entonces has que apelar a tu sentido del deber, a tu autoexigencia, para estudiar cuando no te gusta. Y para eso es importante reforzar tu voluntad.
Una conversación con tus padres o con un profesor puede resultar muy reveladora; no hace falta que tenga relación con el final de una evaluación o con las notas. Te puede ayudar a plantearte qué motivos tienes para estudiar y ayudarte a descubrir si son adecuados o no.

La falta de organización.
Debe aprender a organizar su tiempo y decidir sobre el mejor modo de dar cabida a todo: estudio, descanso, aficiones, ratos de reunión familiar, encargos en la casa, etc.
Razonar a la hora de aplicar orden de prioridades en las cosas que tiene pendiente. Se pierde a veces mucho tiempo por no tener a mano todos los apuntes al día y bien ordenados. Lo mismo sucede con los libros, el material de dibujo, de deporte, etc. Es muy interesante utilizar una agenda para las cuestiones académicas, para programarse bien y evitar olvidos.
Hay que procurar….

· Hacerse un plan de estudio realista. Es cuestión de hacer –por escrito si es posible – un plan básico de una semana normal. En él han de constar con claridad las horas que se dedicarán al estudio también durante el fin de semana.
· No engañarse dejando las cosas para mañana o para después. Aprovechar las horas buenas y las malas. Para ello, no dejar las asignaturas de tipo más especulativo para las horas en las que se tiene más sueño y menos lucidez.
· Protegerse contra los posibles focos de distracción: La televisión y el vídeo, las incursiones a la heladera, pretender estudiar con música tumbado en la cama, quedar a estudiar con los amigos que estudian poco y pasarse la tarde luego charlando, etc.
· No rendirse antes de tiempo. Salvo honrosas excepciones -normalmente en situaciones especiales- suele ser un error abandonar las asignaturas para tener más tiempo para otras. Es mejor resolver el problema haciendo un plan especial de estudio que permita sacar más horas. Además, muchas veces, esa tensión y esa falta de tiempo hacen que se incremente el rendimiento del poco tiempo que se tiene. Cuando hay demasiada holgura de tiempo -en las vacaciones, por ejemplo- es más fácil desaprovecharlo.
· Todos los momentos del curso son importantes. En el primer trimestre se ponen las bases, en el segundo se consolidan y en el tercero se consuman los buenos resultados. La tentación fácil del principio de curso es pensar que queda tiempo de sobra; la de final de curso creer que ya nada tiene remedio; y la de mitad de curso, una mezcla de las dos

CONSEGUIR EL ÉXITO
· 1.-Necesitas cinco minutos cada día para planificarte. Cuanto más atareado estés, más necesitas organizarte bien. No te dejes atropellar por la improvisación de acometer lo más inmediato. Date la satisfacción de saber por dónde vas y de cumplir lo que habías previsto para cada día.
· 2.- No empieces nunca por lo fácil con la excusa de ir entrando en materia poco apoco. Valdría si hubiera mucho tiempo por delante, pero generalmente no lo hay. Comienza por lo más importante, si no lo haces así, te perturbará la ansiedad de saber que aún tienes pendiente aquella tarea y el nerviosismo te hará aumentar la sensación de impotencia.
· 3.- Lleva siempre encima una agenda en la que puedas anotar una idea antes de que se te olviden datos que sea necesario recordar.
· 4.- Conserva pocos papeles. Tira todos los que hayas usado y no sean imprescindibles. Archiva con un método claro todo lo que decidas conservar. No hay más desesperantemente perdido que el que se emplea inútilmente en busca de un papel mal archivado. Hay quien pierde más de la mitad del tiempo que tiene de estudio en buscar y rebuscar informaciones entre una marabunta de fotocopias y cuadernos. También este desorden puede ser una coartada para que parezca que se emplea el tiempo en estudiar
· 5.- No comiences nunca a hacer una cosa que no confíes seriamente en que puedes realizarla. Cuando se produce un fracaso y no se llega a completar una tarea se produce una insatisfacción y un cierto sentimiento de culpabilidad que lleva a perder cantidad de tiempo. Es mejor pedir ayuda cuando sientes que lo necesitas.
· 6.- Antes de ponerte a estudiar prepara todas las cosas que preveas necesarias. Es conveniente cortar a tiempo las posibilidades de fuga. Quien mucho se levanta, poco interés tiene.
· 7.- Aprovecha en lo posible tus mejores momentos. ¿Eres de los madrugadores? ¿Se te dan mejor las tardes o eres ave nocturna? Estudia en tus momentos altos de energía. El descanso y la diversión exigen menos concentración
· 8.- Busca sitios adecuados donde poder estudiar sin que haya demasiado ruido. Las casas modernas no están hechas pensando en estas necesidades. Si es necesario habrá que recurrir a otras posibilidades fuera de casa: bibliotecas públicas, etc. La concentración es imprescindible.
· 9.- Con el estómago lleno es difícil de conseguir esta concentración: busca tiempos más oportunos.
· 10.- Procura trabajar en una mesa en la que sólo tengas las cosas que necesites para el estudio; evita en lo posible el riesgo de distraerte.
· 11.- Empieza a estudiar con un vistazo general de los temas. Esto ayuda a concentrar la atención y a despertar el subconsciente. Tener un marco de referencia general te ayudará a comprender mejor los pasos de un proceso.
· 12.- Reserva algún tiempo del día para resolver las cosas triviales, pero necesarias. Evita la sensación de estar pendiente de terminar algo que se ha quedado a medias. Esta sensación es frustrante y descentra.
· 13.- Cuando lo necesites, descansa, relájate, oye música. No esperes a que el cansancio se convierta en agotamiento, pero tampoco diversifiques los objetivos de tu atención haciendo varias cosas a la vez, como estudiar y oír música; las dos cosas a la vez no suelen funcionar bien
· 14.- Ponte cómodo para estudiar, postura relajada, ropa floja y cómoda, buena luz.
· 15.- Pide ayuda cuando la necesites porque no consigues resolver una cuestión. Remite tus dudad al profesor, en clase, pero no dejes pasar un tiempo excesivo para aclararlas. Muchas veces basta con una consulta a tu compañero, pero cuando haga falta hay que recurrir al profesor, con quien siempre hay que mantener una relación personal que facilite estas consultas.


10 DIFICULTADES EN EL ESTUDIO Y CÓMO SUPERARLAS

Hay una serie de dificultades típicas en el estudio en las que probablemente has caído alguna vez. Ya sea porque tenés dificultades en la concentración, falta de base, demasiado optimismo, etc. hay que superarlas, porque según pasen los años, esos problemas no van a mejorar. Al contrario, tenderán a empeorar ya que el grado de exigencia académica va aumentando.

1. -No estudiar o jugar a "como que estudio".
El gran problema de esos chicos no es que estudien mal o no puedan, sino que, simplemente, no estudian. Hacen tareas, deberes y dibujos, pero no estudian. Se meten en su cuarto dos horas, tranquilamente, y todo el mundo está convencido de que está estudiando. Pero estos chicos han podido pasarse la tarde entera haciendo un dibujo o una redacción sin estudiar. Así no se adquiere ese sedimento necesario de conocimientos para cuando llegue el examen.
A estos, lo que más les conviene, es empezar todos los días por estudiar. Nada más sentarse, que estudien un tiempo. Si son menores de 10 años, podría ser un cuarto de hora o veinte minutos. De 10 a 14 años, por lo menos tres cuartos de hora. Y chicos a partir de 15 años, por lo menos de una hora a hora y media de estudio todos los días. Y después del estudio, hacer las tareas. Necesitan un cierto control para que realmente sigan este plan. Si un chico tiene toda la tarde para hacer las tareas, gasta la tarde entera. Si tiene sólo una hora, se ajusta y va más deprisa. Además, el estudio cansa y hay que estudiar cuando se está más descansado.

2. Estudio atropellado, de últimos días.
Tiene que ver con el anterior. Éste sí estudia, pero sólo unos días, antes del examen. Además, se crea en la familia la idea de que ha estudiado mucho ya que queda la sensación, tanto al chico como a los padres, de la última semana y media: se ha levantado pronto, se ha esforzado muchísimo, se ha acostado tarde estudiando. Así, piensan, no hay derecho a que luego suspenda. Pero, en realidad, falta el sedimento necesario para que la memoria asimile y comprenda las lecciones.
El trabajo y el estudio diario, con control. Todos los días ha de estudiar algo. Si un día tiene mucha tarea, después del estudio hará mucha tarea. Que tiene poca tarea, después del estudio hará poca. Si no tiene tarea, sólo estudiará.

3. Falta de ejercicio. Confundir "Lo entiendo" con "Me lo sé".
Hay chicos que confunden el "lo entiendo" con "me lo sé". Leen una lección y como la entienden, ya creen que se la saben y dejan de estudiar. O si en clase entiende las matemáticas ya creen que se lo saben. Sin embargo, lo que les hace falta es ejercitación, repasar y hacer los ejercicios un par de veces para ver cómo funcionan. Es el caso típico de los chicos que fallan en las operaciones, aunque saben cómo hacer los ejercicios.
Que vean la ejercitación como parte de su estudio. Hay que enseñarles que "lo sé" es igual a "lo entiendo" más "me lo estudio". Entender es lo más difícil, pero una vez que lo entendés hay que aprenderlo: hay que dedicar esfuerzo, repetirlo varias veces, hay que usar la memoria, hay que hacer tres veces más esos problemas.

4. Dificultades de concentración. Falta de control de la imaginación.
Hay chicos a los que les cuesta mucho concentrarse, les cuesta el arranque: desde que se sientan hasta que empiezan a estudiar pasa más de media hora.
Hay que empezar a estudiar a una hora fija para conseguir un buen rendimiento cerebral. Si una persona se acostumbra a hacer el esfuerzo de concentrarse todos los días a la misma hora, al cabo de veinte días la cabeza se concentra con más facilidad a esa hora.
Por otro lado, el mejor consejo para sujetar la imaginación es utilizarla en el estudio en lugar de hacer el esfuerzo de cambiar de pensamientos y empezar de nuevo cada vez que se nos va, hay que poner la imaginación en cada tema de estudio. Si estoy con volcanes, me imagino cómo son, la lava que echan, etc. Eso ayuda también a que se graben mejor las lecciones.
Con respecto a la televisión, hay que decir que cansa la cabeza y daña la capacidad de concentración, lo mismo que los videojuegos.

5. Problemas de comprensión. Dificultades en la lectura. Vocabulario pobre.
Es el caso del alumno que se esfuerza pero que no puede. Es el chico al que si le explicas la lección y se la contás, se la aprende enseguida. Pero si tiene que aprendérsela él solo con el libro le cuesta mucho. Se siente defraudado, pues hay esfuerzo pero no resultados.
Lo que necesita es atajar el problema. Si lee mal tiene que leer mejor y esto no se consigue leyendo mucho, sino leyendo bien, ayudándole a leer mejor, corrigiéndole los defectos de lectura y ayudándole a hacerse un cuadernillo de vocabulario. Con ese pequeño diccionario personal tendrá que hacer ejercicios con las palabras desconocidas. Si no se ataja, no se mejora. Se le puede decir que estudie más, pero llega un momento en que se hunden. Y si hay un problema más serio, como dislexia, etc., hay que llevarle al especialista. No vale con estudiar más.

6. Lagunas. Falta de base.
Son los que entienden las matemáticas, por ejemplo, pero fallan en las fracciones, que pertenecen al programa del año pasado, cuando estaban enfermos.
Con éstos, hay que dejar de quejarse y ponerse a rellenar las lagunas. En el colegio es muy difícil, pero para ello es muy útil un profesor particular o que el hermano mayor se dedique a explicar. El profesor dirá cuáles son las lagunas. Y, una vez conocidas, habrá que solucionarlas, en vez de quejarse continuamente.


7. Ansiedad, angustia. Bloqueo emocional, inseguridad.
Hay chicos que por un exceso de ansiedad y de miedo a suspender se angustian. Comienzan a estudiar y como salen con el gran miedo a perder, se angustian. Quizá tras un año de malas experiencias, de un fracaso, de haber suspendido muchas... pierden la confianza en sí mismos y se sienten agobiados. Se les distingue fácilmente cuando llegan los exámenes pues tienen trastornos intestinales, duermen mal, están tensos, les sudan las manos en medio del examen, etc. Son chavales temerosos y eso les bloquea, pues no tienen la serenidad suficiente para sacar a la luz lo que saben.
Hay que tratarles de dos maneras. Primero, dándoles seguridad, valorando su esfuerzo, reforzando la confianza en que ellos son capaces, reforzando sus pequeños éxitos. Y, después, enseñándoles a controlar esa ansiedad, enseñándoles a relajarse, mediante algunas técnicas.



8. Timidez, inseguridad, no preguntar, no puedo.
En este caso, el bloqueo llega por la timidez y la vergüenza a preguntar. Es el temor al ridículo, a quedar mal y así, el "no puedo" es la excusa que ponen para no enfrentarse a un problema que les da miedo.
Hay que superar ese temor al ridículo y a preguntar. Hay que preguntar en clase, planteárselo uno como un punto de esfuerzo personal.

9. Los "estudiosos" memorísticos.
En estos chicos, el desarrollo intelectual no va parejo al sistema de estudio. Hasta los 12 años hay una gran facilidad para memorizar así, leyendo varias veces. Pero a partir de esa edad, la memoria es más lógica, más de relación, de sentido global. Hay chicos que pasan los cursos y siguen estudiando igual, leyendo veinte veces. Eso, además de aburridísimo, es un tipo de memoria peligrosa. Son los chicos de "lo tengo en la punta de la lengua"; "si me dice la primera palabra, sigo yo", "¿eso era lo que estaba en la página segunda?". Sufren mucho, dedican mucho tiempo y según pasan los cursos va a peor.
A estos hay que enseñarles a estudiar, a cambiar el método de estudio, sabiendo que al principio les costará, pero luego será muy eficaz.

10. Los "optimistas" del "ya me lo sé, pregunta".
"Lo tengo dominado. A éstos hay que ayudarles a tocar tierra, preguntándoles para que comprueben que efectivamente no se lo saben.
Hay que enseñarles dos técnicas: que se autoevalúen y que repasen. Que no digan "Ya me lo sé" antes de haber cerrado un libro y de haberse preguntado. Y, a la vez, enseñarles a repasar. Los contenidos de las lecciones se aprenden bien una vez que se repasa. En el estudio se entiende, en los repasos es donde de verdad se aprende.


PLANIFICAR EL ESTUDIO

El doctor López es un cirujano con una gran autoestima: se considera un gran profesional. Ha escrito como organiza su tiempo de trabajo y vos vas a valorar si lo hace bien o mal. Marca una de las dos casillas a la derecha de la frase:

BIEN
MAL
Opero cuando tengo ganas. Mis pacientes saben que les voy a operar, pero nunca fijo fecha.


Siempre dejo el último al enfermo más difícil. Cuando le toca estoy tan cansado que prefiero dejarlo


A veces, cuando estoy en el quirófano con todo preparado, no me siento inspirado y aplazo la intervención para el día siguiente.


Muchas veces empiezo a operar y a los cinco minutos lo dejo para descansar.


A veces trabajo durante horas y horas sin descansar ni un minuto, pues he demorado tanto las intervenciones que se acaban las posibilidades de salvar a mis enfermos, pero así siempre he salvado a alguien.


En general, estoy meses sin operar, y antes de las vacaciones, opero desesperadamente.


Muchas veces me pongo a intervenir a un enfermo y no sé de qué le tengo que operar.


En general nunca tengo mucha idea del trabajo que hay por delante, aunque sé que me esperan pacientes pendientes de operar.


A veces reservo diez horas para una intervención muy sencilla.


Otras veces sólo reservo diez minutos para hacer una operación complicada.


Cuando me llaman por teléfono en medio de una intervención, por supuesto que la interrumpo, pues seguro que será más importante que lo que estoy haciendo. Lo mismo hago si me hablan o si recuerdo algo que tengo que hacer.


Mientras estoy operando me gusta pensar en lo que haré el fin de semana con mis amigas y amigos, sirve para hacer más llevadero el rato.


Cuando tengo que hacer una operación, no lo anoto en ningún sitio, o uso papelitos que se me pierden pero casi siempre me acuerdo.


Pensá si te dejarías operar por el doctor López...
Ahora vamos a hacer un ejercicio más personal: vuelve a leer las frases del cirujano, pero sustituyendo:
 Donde dice operar/intervenir, lee estudiar/trabajar.
 Donde dice enfermo, paciente, lee materia / asignatura.
Al mismo tiempo, pensá si las nuevas frases dicen cosas que se te podrían aplicar.

Si el número de veces que has contestado Si es superior a cuatro deberías buscar la forma de organizarte mejor.








PLANIFICACIÓN
A continuación tienes unas frases referidas a la planificación y utilización del tiempo de estudio. Al final de cada una, marca la casilla SÍ si las frases valen para ti Y NO en caso contrario
CUESTIONES

NO
1.Dejo para última hora casi todo lo que tengo que hacer o estudiar


2.No he conseguido habituarme a trabajar diariamente un tiempo fijo


3.En casa no tengo horario o agenda de estudio


4.A veces dejo sin acabar el trabajo o el estudio


5.Pierdo mucho tiempo por no haber preparado lo necesario antes de empezar a trabajar y estudiar


6. Mientras estudio o trabajo. suelo tener interrupciones que me roban tiempo


7.Anoto en cualquier sitio los trabajos que tengo que hacer o los temas que hay que estudiar


8. Empiezo a trabajar por lo que más me gusta o me es más fácil, y dejo para el final lo más difícil o desagradable.


Si el número de SÍ es superior a dos, deberías dedicar algún rato a organizar su tiempo.



LEYES PARA ORGANIZAR TU TIEMPO
Esta actividad tiene como objetivo facilitar criterios que deben guiar la gestión del tiempo de tu estudio. Las leyes son:
1. AUTONOMÍA: Podés pedir ayuda para organizarte, pero el que debe decidir y después cumplir sos vos.
2. REGULARIDAD: Dedicar diariamente al estudio alrededor de tres horas es más eficaz darse grandes palizas de vez en cuando.
3. DOSIFICACIÓN: Por cada hora dedicada a estudiar, debes descansar diez minutos, aunque no te sientas cansado.
4. EXCLUSIVIDAD: Durante el tiempo de trabajo evita lo que te pueda distraer. Aplaza para el tiempo libre cualquier otra cosa. Que nadie te moleste; eres un profesional.
5. PRIORIDAD: Asigna a cada área el tiempo de forma proporcional a su dificultad.
6. ORDENACIÓN: Empieza a trabajar por las áreas que consideres de dificultad media. Sigue con las difíciles y acaba por las fáciles. Los científicos aseguran que es lo más práctico.
7. AGENDA: Hazte con una agenda, que te acompañe a todas partes. Escribe en ella tus proyectos y todo lo que tienes que hacer. Tu agenda será tu jefa: ella te indicará siempre qué tienes que realizar. Úsala con exigencia.

UN CASO PRÁCTICO.
Dale tiempo al trabajo y trabajo al tiempo
Se trata de facilitar una guía que sea la referencia para confeccionar una programación adecuada.
María José, que estudia 3º año, se considera una profesional. En su agenda asigna un tiempo para trabajar y un trabajo para cada tiempo. No es muy inteligente: algunas cosas le cuestan mucho esfuerzo, pero tiene muy claro lo que quiere y nunca ha suspendido.
• Ella escribe con lápiz para rectificar si es necesario.
• No trabaja igual todas las semanas: a veces le quita tiempo a un área para ponérselo a otra; a veces dedica una hora más o una hora menos; también ha trabajado en fin de semana pero siempre realiza lo que tiene programado
 ¿Serás capaz de organizar tu propia agenda? ¿Cómo te gustaría que fuese?
 Piensa y escribe los criterios que vas a elegir para organizar tu agenda.




EL SUBRAYADO

El objetivo del subrayado es destacar las ideas esenciales de un texto. Posteriormente, al leer únicamente lo subrayado se puede recordar el contenido de dicho texto.
No hace falta decir que existen teorías psicológicas de la percepción humana que fundamentan esta técnica, ya que está demostrado que la memoria se fija y recuerda más y mejor aquellas cosas que se resaltan.
Por esto, es necesario que no solo conozcáis esta técnica, sino que también la dominéis y uséis. Su fundamento consiste en resaltar de otro color (se recomiendan colores vivos como el rojo o verde o los colores fluorescentes, aunque cansan más) aquellas series de palabras que tienen sentido y contenido propio semántico que con una lectura posterior de lo subrayado esto tenga sentido y se entienda el texto y se vean reflejados sus datos más relevantes. Por ello no es necesario subrayar artículos, conjunciones (solo en caso de engarces) preposiciones y si es conveniente subrayar sustantivos, verbos, adjetivos, fechas, nombres propios, etc.
Es evidente que es una técnica algo difícil de llegar a dominar y requiere mucha práctica.
Para subrayar no se recomiendan más de dos colores y también se puede sustituir la "raya" por recuadros o corchetes para señalar párrafos enteros o frases que consideremos de capital importancia. Subraya si es necesario en tus libros (están para tu servicio y no para adornar) y en tus apuntes o fotocopias. Es recomendable que el subrayado se realice a lo largo de la segunda lectura del texto o tema que tenemos que estudiar. Pero también se pueden ir señalando algunos datos o ideas principales en la primera lectura rápida.
También tienes que ir acostumbrándote a escribir notas a los márgenes, en aquellos momentos en que no te queden claras algunas ideas o para completar con otros datos. Estas notas luego son muy beneficiosas ya que facilitan la comprensión y amplían conocimientos.
Como ya señalamos anteriormente, en la segunda lectura, reposada, comprensiva y analítica, es cuando debemos hacer estas operaciones y también es el momento de pararnos a comprender las gráficas, tablas, mapas o recuadros. En muchas ocasiones aportan gran cantidad de información de una manera reducida y clara que nos ayudan a comprender mejor lo que estamos leyendo y de una forma más directa. Pensemos que estamos estudiando un tema de economía acerca de las distintas producciones de un país. Si en esa página tenemos una gráfica de barras o por sectores con las cantidades y elementos que produce sabremos inmediatamente en que despunta y en cual otra es deficitaria.





¿Cómo tomar apuntes?
Se dice que el saber tomar apuntes; estimula a los estudiantes así como dirige y canaliza nuestro aprendizaje.
La toma de apuntes es más difícil de lo que parece. Por eso requiere un entrenamiento concreto y práctica. La concentración es algo fundamental.
Una buena idea para facilitar la toma de apuntes es que sepamos de qué va el tema que nos van a exponer. Por eso, si es posible, sería conveniente echarle un vistazo al tema el día anterior para saber por donde irán las cosas.
Por otra parte, tu actitud ante el profesor y el tema deberá ser positiva. No tengas prejuicios y no te dejes llevar por los estados de ánimo, ni por las simpatías o antipatías. Concéntrate en lo que haces. Controla tu atención. No divagues.
Es fundamental que estés atento al profesor, mírale, busca las ideas claves de la explicación y concentra tu atención en:
· Captar la lógica de lo que expone el profesor.
· Comparar lo que dice con lo que ya sabes.
· Busca la utilidad para ti de lo que explica.
· Resume lo que el profesor va diciendo.
Utiliza papel que puedas archivar. Siempre el mismo, con el mismo formato. Guarda los apuntes en carpetas por materias y por días.
Inicia los apuntes poniendo en la parte superior de la hoja la fecha y la asignatura o materia. Esto te facilitará su clasificación y orden.
Escribe con letra legible y clara Los apuntes debes tomarlos de tal manera que sean fáciles de leer, para no tener que pasarlos a limpio. No escribas todo lo que el profesor diga. No lo copies todo. Sólo las ideas importantes. Copia las fechas, nombres, referencias, etc. Luego puedes completarlo con ayuda del libro o de algún compañero.
Deja margen a la derecha y a la izquierda para anotaciones o aclaraciones. Utiliza el subrayado y las mayúsculas para resaltar lo más importante. Se breve. Abrevia cuanto puedas las palabras. Utiliza siglas, abreviaturas (comprensibles posteriormente) o cualquier signo que tu crees y que para ti signifique algo. Algún ejemplo puede ser:
Igual..........= Siglo..........S. Más que..........+ Menos que..........-
Hombre..........H Mujer........M. Mayor.......> Menor..............<
Que............... q/ Por............. x Porque…….pq
A los adverbios acabados en mente añade al adjetivo un símbolo: rápida//; fácil//; normal//
Tu mismo puedes crear tus propias normas o símbolos. Práctica un poco y verás como los resultados mejorarán.
Una idea también importante es que no pases tus apuntes a limpio. Pierdes tiempo. Esfuérzate en tomarlos con la suficiente claridad para que te valgan para su posterior estudio.


Los esquemas y los cuadros sinópticos
El esquema es una técnica que realmente tenemos muy olvidada pero que da mucho juego. No es una técnica sencilla ya que depende directamente de como se haya realizado el subrayado y la lectura.
Un esquema debe presentar las ideas centrales del texto, destacadas con claridad. Presenta de forma sencilla y lógica la estructura del texto. Debe tener una presentación limpia y clara. En el esquema se destacan los puntos principales del texto y los subapartados que consideres de interés. Se utilizan signos para destacar ideas, subrayado, las mayúsculas y minúsculas, colores y distintos tipos de letras. Escríbelo en términos concisos.
Para trabajar el esquema parte de la lectura analítica de un texto y de su posterior subrayado. Vete separando cada contenido por puntos, rayas y subrayados. Mira si lo que has escrito expresa la idea completa del texto sin dejarte datos fundamentales. Puedes utilizar las mayúsculas para señalar los apartados fundamentales y las minúsculas para los elementos de importancia que hay en ellos.
El esquema se escribe todo seguido y debe intentarse que ocupe el menos espacio posible. No existen nexos de unión de ideas sino, en ocasiones, flechas. No se deben escribir palabras sin contenido propio del texto que analizamos.
El esquema es como un resumen pero más esquematizado, sencillo y claro. Con un solo golpe de visto podemos percatarnos de la información que contiene el texto estudiado.
Por lo tanto a partir de un texto determinado puedes realizar las siguientes actividades:
- Localizar las ideas centrales del texto.
- Subrayar las palabras o frases que destaquen esas ideas. Subrayar sobre todo las palabras clave.
- Anotar al margen la idea central del texto y de los distintos párrafos.
- A partir de estas actividades hacer el esquema del texto, con el delante, ampliándolo con posteriores lecturas si es necesario.
Por otra parte el cuadro sinóptico es una variante del esquema que sobre todo se utilizará cuando existan datos muy concretos como fechas, nombres, cantidades y cuando un texto habla de los mismos elementos pero en distintas contextualizaciones. Su técnica es igual a la del esquema pero para su plasmación se confecciona un cuadro con las entradas que sean necesarias.

EJEMPLO DE ESQUEMA
Esquema del texto Los Romances.
Cronológicamente se dividen en:
1. Romances viejos:
- Autor anónimo.
- Origen=Cantares de Gesta:
* verso se divide en dos octosílabos.
* rima asonante los pares.
2. Otros romances: Siglo XIV a XVI.
- Temas:
* históricos: Cid, Infantes de Lara, D.Rodrigo.
* fronterizos: reconquista;
* carolingios: Carlomagno, Roldán.
* novelescos;
* líricos.



El resumen
Es una de las actividades más importantes y claves dentro del estudio. La puedes realizar después de tener hecho el subrayado y posteriormente a haber estudiado el tema, lección o texto. Tienes que intentar hacerlo sin volver a mirar lo que has leído, y si lo haces, lo menos posible. Este resumen debe ser breve pero completo con las ideas fundamentales y utilizando tu propio vocabulario y modo de estructuración de las oraciones. Redactado en forma personal. Tienes que utilizar partículas de enlace entre los distintos párrafos que produzcan la hilazón lógica entre los mismos. Es evidente que un buen resumen depende mucho de la comprensión del texto y de las veces que lo hayas leído (son recomendables tres; una rápida, otra lenta con subrayado y otra más lenta con memorización y análisis).
El resumen se utiliza para sintetizar el contenido de un texto que luego hay que comentar o estudiar. Facilita el mejor estudio de la lección y su compresión y a su vez facilita la concentración mientras estudias. Con un buen conjunto de resúmenes de las distintas lecciones puedes realizar un repaso final muy positivo de lo que has estudiado.
Para dominar esta técnica tendrás que hacer ejercicios del tipo siguiente:
· Análisis y comentario escrito de textos.
· Resúmenes de los mismos.
· Lecturas detenidas.
· Resúmenes de textos a partir de lo subrayado.
Es conveniente que posteriormente al resumen lo leas varias veces y lo completes, si es necesario, con el texto delante. En principio, todo tipo de textos son válidos para practicar esta técnica.

La memoria y las reglas Mnemotécnicas.

Uno de los temas que más interés tiene en las Técnicas de Estudio, es la memoria. Es evidente que en todo proceso de estudio la memoria es uno de los elementos fundamentales. Pero lo importante es entender la memoria correctamente.
Por todo ello en esta página hablaremos de este tema que tanto os preocupa y daré trucos y consejos para mejorarla. También hay un apartado especial para las reglas mnemotécnicas (trucos que facilitan la memorización).
"La memoria funciona como un gran archivador. Ubicar la información en el lugar correspondiente implica agilizar el proceso de selección y recuperación del material"
Empezaremos diciendo que la memoria y el proceso memorístico está formado por lo que podríamos denominar tres fases:
· Registrar.
· Retener.
· Rememorar
Nuestra memoria es como un gran armario o archivador en el que es evidente que encontraremos mejor las cosas si las tenemos ordenadas de una forma lógica. También está demostrado que recordaremos más y mejor aquello que comprendamos (por eso no es conveniente "chapar" sin saber lo que "chapamos")
· Registrar: En esta fase adquirimos el contacto con los elementos que posteriormente memorizaremos. Sería la primera lectura. Para tener más claros estos conceptos que leemos usamos el subrayado, los esquemas, los resúmenes o fichas. Pero es fundamental que lo que leamos y escribamos lo hagamos de una forma ordenada, lógica y comprendiendo lo que se lee. No os pongáis a estudiar un tema de matemáticas que se fundamenta en uno anterior que no habéis leído, o no intentéis estudiar el por qué de la Guerra Civil Española si no habéis mirado anteriormente lo que paso en los años previos.
· Retener: Cuanta más atención prestemos a lo que intentemos memorizar, más fácil nos será retenerlo. Esta es una premisa básica dentro del proceso de la memorización: la atención. Por esta razón el interés y la motivación ante lo que estamos leyendo y pretendemos memorizar es algo básico. Es fundamental la concentración: aislaos de ruidos, olores, gente que pasa por la habitación, de la televisión e incluso en ciertas ocasiones de la música No es recomendable estudiar con música cuya letra conocemos, esto nos distraerá. Tampoco es bueno estudiar con la radio y por supuesto la televisión es nefasta. Si queréis estudiar con música hacerlo con clásica o instrumental. Tampoco que sea Rock o Heavy, más bien Jazz, Blues, Regae, New Age, Folk, etc. Para retener las cosas, releer los textos solo con lo subrayado, releer la fichas o anotaciones y, por supuesto, releer los temas.
· Rememorar: Este es el proceso más importante y el que a todos más os interesa. El recordar aquello que hemos memorizado. Para ello, la manera de haberlo retenido (ordenado, con lógica, con notas, subrayados, esquemas) va a ser fundamental y también el interés que hayamos puesto en ello. A veces intentamos recordar algo que sabemos claramente que lo hemos estudiado, pero como no lo hicimos de la manera correcta y con la lógica necesaria no es imposible rememorarlo. Insisto mucho, como veis, en la lógica, el orden, la intención. Pero es que realmente son las piezas claves de la memoria.
Existe una memoria a corto plazo y una memoria a largo plazo (esta segunda es la que a todos vosotros más os interesa). En un principio cuando empezamos a estudiar, la información pasa a la memoria a corto plazo, pero lo que tenemos que pretender es "enviarla" a la memoria a largo plazo, que es la que pervive y la que necesitamos a la hora de los exámenes o pruebas. Para que la información pase a la memoria a largo plazo es necesario la repetición, la concentración, el orden y la lógica y sobre todo el interés por esos contenidos que queremos memorizar. Lo que si es evidente es que se recuerda mejor lo que previamente hemos escrito (no todo al completo) o que previamente hemos clasificado. Por eso es tan importante el subrayado, los resúmenes, los esquemas y las fichas. Un tema de 30 páginas de historia se puede resumir en una ficha señalando en ella solo los apartados o puntos clave del tema y luego al mirar simplemente esa ficha, si ya lo hemos estudiado, la mente irá soltando todos los contenidos de esos apartados ella sola. Por esta razón, cuando en un examen nos pregunten sobre el reinado de Felipe II podremos recordar lo estudiado ya que nuestra mente ya tiene esa información procesada y memorizada y solo necesita el epígrafe de ese material para soltar toda la información.

Las reglas mnemotécnicas o trucos para recordar:
Las reglas mnemotécnicas son un conjunto de truquillos, casi siempre lingüísticos, para facilitar la memorización. Posiblemente habréis oído hablar de ellos. Se basan en que recordamos mejor aquello que nos es conocido o aquello que nosotros mismos hemos creado. Esto lo veremos mucho mejor con un ejemplo.
La primera línea de la tabla periódica de los elementos químicos:
Litio-Berilio-Boro-Carbono-Nitrógeno-Oxígeno-Fluir-Neón.
Si tenemos que memorizar esta serie, un buen método sería confeccionar una frase con la primera o primeras letras de cada uno de estos elementos: "La BBC no funciona". Esta podría ser una de las posibilidades para acordarnos de estos ocho elementos. Fijaros que he utilizado la L de Litio (La), la B de Berilio y Boro, la C de Carbono (BBC), la N de Nitrógeno y la O de Oxígeno (no), la F de Fluir y la N de Neón (funciona).

Esta es una posibilidad para este ejemplo concreto, pero seguro que podéis encontrar otros muchos no solo para esta serie sino para esas cosas que tenéis que estudiar y no hay manera de memorizarlas y recordarlas.

Otra posibilidad es la de confeccionar historias, o cuentos, o refranes, seguro que alguna vez habéis oído alguno.


Como Estudiar materias como: Sociales, Naturales y Lengua
1º Leer y comprender: Lo primero es echar un vistazo al tema y tratar de descubrir los apartados y subapartados. Luego leer y tratar de comprender lo que pone.
2º Subrayar: Se trata de descubrir las ideas más importantes. Es interesante subrayar de tal manera que lo subrayado tenga sentido por sí mismo. (Si tienes mucha prisa se puede hacer a la vez que el primer apartado)
3º Hacer esquemas: La idea es conseguir tener en una o dos hojas por tema, todo lo que me tengo que aprender y memorizar. El esquema ha de ser lo más completo posible. Este punto es en el que más tiempo emplearás.
4º Memorizar: Ya sabes... memorízate el esquema totalmente. Si el esquema está bien hecho te será más fácil. Esta fase debe hacerse uno o dos días antes del examen.

Como Estudiar materias como: Sociales, Naturales y Lengua
1º Leer y comprender: Lo primero es echar un vistazo al tema y tratar de descubrir los apartados y subapartados. Luego leer y tratar de comprender lo que pone.
2º Subrayar: Se trata de descubrir las ideas más importantes. Es interesante subrayar de tal manera que lo subrayado tenga sentido por sí mismo. (Si tienes mucha prisa se puede hacer a la vez que el primer apartado)
3º Hacer esquemas: La idea es conseguir tener en una o dos hojas por tema, todo lo que me tengo que aprender y memorizar. El esquema ha de ser lo más completo posible. Este punto es en el que más tiempo emplearás.
4º Memorizar: Ya sabes... memorízate el esquema totalmente. Si el esquema está bien hecho te será más fácil. Esta fase debe hacerse uno o dos días antes del examen.




Mejora tus trabajos

HACER UN TRABAJO
Tienes que conocer bien los plazos de entrega, extensión y demás características.
Planifica el tiempo para que te sobre.
Si es de tema libre, buscar ideas en los índices de los libros de texto, en enciclopedias,... Que no sea ni muy fácil ni excesivamente difícil. Que tenga la amplitud adecuada. Pide consejo en casa.
Los trabajos suelen incluir los siguientes apartados:
1. Portada.- Que sea bonita y clara, con TODOS tus datos.
2. Índice.- Que esté detallado.
3. Introducción.- No más de dos hojas.
4. Apartados.- Deben tener la estructura y extensión correctas.
5. Conclusiones.- En cuanto al contenido y en cuanto a tu valoración personal.
6. Bibliografía.- Detallar los libros, enciclopedias, CDs, museos, Internet, etc., empleados. Detalla el título, autor, editorial, año, páginas... Si estás en cursos superiores, consulta a tu profesor: hay unas normas universales.
7. Una hoja en blanco de cortesía.


FASES PARA LA CONFECCIÓN DEL TRABAJO:
1ª.- Recoger información: Libros de la biblioteca, de texto, mapas, fotos, en museos, Internet, vídeos, películas, CD`s...
2ª.- Establecer los apartados que va a tener el trabajo.
3ª.- Clasificar la información según los apartados. Elegir las ilustraciones que pondremos.
4ª.- Redactar cada apartado con frases claras. Procura no copiar textos enteros, sino resumir la información y combinar la información que posees de distintas fuentes. Cuidado: Entregar unas hojas sacadas directamente de una Enciclopedia o un en CD no sirve de nada y te hace quedar como un tramposo.
5ª.- Revisar la ortografía y redacción. Puedes enseñar el trabajo a alguien para que de su opinión y te haga sugerencias.
6ª.- Pasar a limpio el trabajo, y si te dejan, a ordenador. Haz una portada bonita y en la que figuren todos los datos.
7ª.- Vigila una vez más que figuren tus datos personales. Cuida la presentación y entrega las hojas bien encuadernadas.

jueves, 12 de agosto de 2010

Novena a Nuestra Señora de la Asunción

Ser fieles a la Virgen exige:·

Amarla como Madre
Escucharla como maestra de Fe
Descubrirla como modelo de Vida Cristiana
Invocarla como mediadora de todas las gracias
Ver que su única meta es llevarnos a Cristo para alcanzar al Padre en la unidad del Espíritu Santo.


Por eso la Virgen nos invita siempre a:
Consagrar, es decir, ofrecer nuestra vida a su Corazón Inmaculado.
Rezar mucho, especialmente el Santo Rosario, por la conversión del mundo.
Leer la Palabra de Dios y meditarla todos los días.
Hacer penitencia por nuestros pecados y por los pecados con los que el Señor es continuamente ofendido.
Vivir en una actitud de recogimiento interior.

ORACIÓN PARA CADA DÍA

Acuérdate oh Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno de cuantos han acudido a tu protección e implorado vuestra asistencia, haya sido abandonado de vos.
Animado por esta confianza a vos también acudo y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a aparecer ante tu presencia soberana, no desprecies mis suplicas antes bien dignaos atender a ellas y favorablemente escucharlas. Amén

8° Día. Viernes 13. Día de la Familia.
Pedimos por las familias, especialmente las de nuestra comunidad educativa y todas aquellas que por distintas circunstancias, sufren toda clase de separación.
Oración: María Madre, que cuidaste tu familia de Nazaret, y también a la Gran Familia de la Iglesia y de todos los hombres, intercede por nuestras familias, para que el diálogo, el cariño y la solidaridad no falten, y si faltan, que vuelva sobre cada familia, para encontrar la armonía y la paz que sólo proviene de Dios.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria.

Oración Final:

SOY TODO TUYO “MARIA”

Virgen María, Madre mía, me consagro a ti y confío en tus manos toda mi existencia.
Te confío cuanto tengo y cuanto soy, todo lo que he recibido de Dios.
Te confío mis incertidumbres y angustias, para que en tu corazón yo encuentre, seguridad, sostén y luz en cada instante de mi vida.
Con esta consagración me comprometo a imitar tu vida, y te prometo con la gracia de Dios y con tu ayuda, ser fiel al compromiso asumido.
Oh María, soy todo tuyo, y todo lo que poseo te pertenece ahora y siempre.
AMEN